las verdaderas evidencias de madurez espiritual.
- Ese discernimiento se perfecciona cuando reconocemos el verdadero fruto del Espíritu en nosotros y en otros. Las personas no sólo presentan comportamientos completamente contrarios al fruto del Espíritu, también presentan acciones y reacciones que se le parecen, pero en realidad son falsos. Por ejemplo, gozarse por experimentar una circunstancia positiva, no debe entenderse como gozo del Espíritu. En realidad el gozo del Espíritu es una evidencia de madurez que se manifiesta en una posición frente a todo tipo de circunstancias.
Muchas veces he visto a personas gozarse cuando dicen haber recibido algo que Dios les otorgó. El verdadero gozo del EspÃritu tiene un sólo origen y alimento: el EspÃritu. Por lo tanto el verdadero fruto no se manifiesta cuando recibimos algo de Dios, sino en todo momento; en necesidad o abundancia, en enfermedad o salud, en peligro de muerte o en medio de buenas noticias.