El colérico se siente a gusto con las actividades. De hecho siempre tiene que tener la mente ocupada y estar haciendo algo. Adopta posiciones definidas frente a las cuestiones, y se le puede ver organizando marchas contra la injusticia social.
El melancólico es analítico, puede adquirir toda una variedad de talentos. Es muy crítico, es auto-disciplinado, y le gusta entregarse al sacrificio personal. Toda vocación que requiera talento y creatividad es apta para el melancólico, como filosofía, la ciencia,