El agua es un factor determinante en el desarrollo económico y social, aparte de mantener al entorno natural, es decir es un recurso natural vital para la vida.
Como la urbanización, crecimiento demográfico, creciente competencia por el agua y la contaminación que provoca cambio climático y variaciones en condiciones naturales.
Una mala gestión: actividades como agricultura, desmonte construcción de carreteras o minería pueden provocar acumulación de tierra en ríos (sedimentación).
Contaminación: materia orgánica y los organismos patógenos de aguas
residuales, fertilizantes y pesticidas, lluvia acida, metales pesados por actividad minera e industrial.