La definición más sencilla hace referencia a una serie de conocimientos aplicados para resolver un problema concreto. Si se entiende como la búsqueda de la satisfacción de necesidades, abarca todos los campos de la vida diaria.
Lamentablemente, abundan los ejemplos sobre el mal uso de la tecnología en función de diversos intereses políticos, económicos y militares. Esto lo vemos en la sobre explotación de recursos naturales, la creación de armas con mayor capacidad de destrucción y la comercialización de soluciones que podrían tener un impacto profundo en el desarrollo de sociedades menos favorecidas.